EMILY MURPHY

(JURISTA)


Hasta 1929 en Canadá las mujeres no eran consideradas "personas".

Emily Murphy em Ontario el 14 de marzo de 1868 hija de un hombre de neocios llamado Isaac y de Emily. Creció bajo la influencia de su abuelo Ogle Robert Gowan, un popular político, y de dos de sus tíos un juez de la Corte Suprema y un senador, su hermano también fue abogado de la Corte Suprema, otro familiar también fue jurista y senador por lo que el estudio de las leyes ya estaba en su ADN.

Los estudios los realizó en un colegio privado para niñas en Toronto, y en esa ciudad conoció al que fuera su marido Arthur Murphy y tuvieron cuatro hijas. Tras el fallecimiento de la tercera de ellas por difteria la familia  se mudó a Edmonton tras pasar primero por Manitowa.

A los cuarenta años, cuando sus hijas ya se habían independizado Emily comenzó a participar activamente en la lucha por los derechos de las mujeres cuando conoció un caso de Alberta (Canadá)
en el que un hombre vendió su hacienda dejando a su mujer e hijos en la calle y sin dinero al no poseer estos ningún derecho sobre la propiedad. Al enterarse de este hecho inició una campaña que culminó con su primera victoria al ser reconocidos  los derechos sobre un tercio de las propiedades a las mujeres casadas.

En 1916 junto a un grupo de mujeres intentó asistir a un juicio contra unas mujeres bajo acusación mas que dudosa de prostitución pero el juez ordenó su desalojo al considerar que el juicio no era apto para ser presenciado por por personas de ambos sexos, Murphy protes tó ante el fiscalde la provincia diciendo que "Si la evidencia no puede ser escuchada por personas de ambos sexos, el gonierno debería establecer un juzgado especial presidido por mujeres para enjuiciar a otras mujeres". Esta petición fue aceptada, no sin esfuerzo, y Emily se convirtió en la primera mujer magistrada, ya no solo de Canadá sino de todo el Imperio Británico. Este nombramiento se convirtió en humo y puso en evidencia la situación de las mujeres ante la ley. El 1 de julio de 1916 presidió su primer caso en el que encontró culpable a la acusada a lo que el abogado de la rea apeló por considerar que Murphy no tenía derecho a dictar sentencia por ser mujer y por lo tanto legalmente no era persona. La Corte Suprema rechazó la apelación.

Un año mas tarde un abogado cuestionó su posición como jueza aludiendo que las mujeres no eran consideradas personas amparándose en una ley heredada de la justicia británica en el que se decía que "las mujeres pueden someterse a castigos y penalidades pero no tienen derechos ni privilegios". Ello provocó que en ese 1917 Emily Murphy encabezara una lucha para el reconocimiento y la abolición de dicha ley y fue elegida como candidata a senadora (cosa no permitida a las mujeres) por el Consejo Nacional de mujeres. Para optar al cargo Emily quiso formular una consulta a los estamentos judiciales sobre cómo las mujeres podrían llegar a ser senadoras. Para que se tuviese en cuenta esta consulta se le pidió que al menos cinco ciudadanos la firmaran. Contactó con otras cuatro mujeres, Nellie McClung, Louise McKinney, Henrietta Edwards e Irene Parlby todas ellas activistas por los derechos femeninos, (a este grupo se las denominó Las Cinco Valientes o Las Cinco Famosas) y enviaron la petición al gobierno nacional para que este a su vez lo remitiera a la Corte Suprema. Se formuló que si las mujeres estaban incluídas en la palabra "persona" mencionada en un artículo del Acta de la Nortamérica Británica. La Corte dictaminó que las mujeres no estaban calificadas bajo este parámetro y no podían acceder al puesto de senadoras. Sin lugar al desánimo Las Cinco Valientes prosiguieron en su lucha y apelaron al máximo organismo judicial de Gran Bretaña que resolvió que la palabra persona se refería tanto a hombres como a mujeras y por lo tanto estas podían sr senadoras.

Pese a ello Emily Murphy nunca llegó a ser nombrada senadora, primero porque el Primer Ministro era un liberal y Emily conservadora y el puesto fue ocupado por una filántropa más afín al mandatario, y más tarde tras la victoria conservadora que le podría llevar al Senado tampoco pudo porque la vacante la había dejado un senador católico y ella era protestante. 

Emily murió el  17 de octubre de 1933 sin haber cumplido su sueño de ser miembra de la Cámara Alta canadiense.

En Octubre de 2009, el Senado nombró a las Cinco Valientes "senadoras honoríficas"